En las últimas elecciones legislativas pudimos apreciar el protagonismo que tuvo Internet dentro de las campañas políticas. Vimos a un Francisco De Narváez quien, con el objetivo de llegar a un público joven, utilizó los medios virtuales, eclipsando así a los canales tradicionales.
Luego de la sólida victoria de Barack Obama, principal exponente de esta nueva tendencia, este tipo de técnicas comenzaron a ocupar un lugar preponderante entre los políticos, generando así un nuevo paradigma comunicativo. Esta nueva forma de hacer política cambió radicalmente el mapa comunicativo actual, los receptores no son individuos pasivos que esperan pacientemente ser persuadidos sino que de forma proactiva se involucran y participan en las campañas, constituyéndose en el motor de las mismas. Sin, quienes, a través de su apoyo, su opinión y mediante comentarios, visitas, o creación de blogs, con la participación en redes sociales y el uso del sistema de telefonía celular; forman parte activa de la estrategia política, transformándose así en un eslabón vital para el candidato.
Es esta naturaleza inclusiva y bidireccional, la que hace la diferencia con la campaña tradicional, caracterizada principalmente por sus mensajes unidireccionales, que buscan llegar a la gran masa. En este nuevo modo de hacer campañas, el objetivo es la participación y la comunicación segmentada, lo que significa, enviar mensajes adecuados a cada uno de los públicos meta.
Obama fue uno de los pioneros en el uso de la comunicación 2.0, a través de la puesta en práctica de una adecuada estrategia de segmentación, la cual le permitió llegar a cada uno de sus electores con mensajes y propuestas estrictamente diseñadas para cada uno de ellos.
En Argentina, Francisco de Narváez, fue el primero en dar este paso desde el mundo tradicional al del las estrategias 2.0. Ya en el 2007, el en ese entonces candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires comenzó a acercarse al mundo digital haciendo uso de Second Life como parte de su campaña. En las últimas elecciones la estrategia 2.0 ocupó un lugar primordial en su estrategia, ya que desarrolló diversos sitios Web que tenían un eje temático y objetivo específico, pero que juntos coadyuvaban al cumplimiento del gran objetivo.
Asimismo, De Narváez, puso al frente de su diagramación de campaña a un grupo de personas altamente capacitadas en el tema 2.0, para lograr así un posicionamiento que le permitiera vencer a sus principales contrincantes. Junto a profesionales de la comunicación y la imagen se trabajó sinérgicamente para proyectar un mensaje coherente que transmitiese los valores e ideas del candidato, buscando acercarlo a los jóvenes, un segmento estratégicamente importante pero difícil de alcanzar por su alejamiento y desinterés en la política.
Como puede verse, Internet está logrando ocupar un espacio trascendental en la vida política de nuestro país y del mundo, pero para obtener resultados es necesario implementar una planificación a largo plazo, de desarrollo y actualización constante. El mundo virtual es un lugar que cambia permanentemente y el cual hay que conocer muy bien si queremos ser exitosos. La improvisación e implementación irresponsable de este canal no suman al logro de los objetivos, por ello la capacitación, innovación y mejora continua son algunas de las premisas básicas que como comunicadores debemos tener en cuenta.
Luego de la sólida victoria de Barack Obama, principal exponente de esta nueva tendencia, este tipo de técnicas comenzaron a ocupar un lugar preponderante entre los políticos, generando así un nuevo paradigma comunicativo. Esta nueva forma de hacer política cambió radicalmente el mapa comunicativo actual, los receptores no son individuos pasivos que esperan pacientemente ser persuadidos sino que de forma proactiva se involucran y participan en las campañas, constituyéndose en el motor de las mismas. Sin, quienes, a través de su apoyo, su opinión y mediante comentarios, visitas, o creación de blogs, con la participación en redes sociales y el uso del sistema de telefonía celular; forman parte activa de la estrategia política, transformándose así en un eslabón vital para el candidato.
Es esta naturaleza inclusiva y bidireccional, la que hace la diferencia con la campaña tradicional, caracterizada principalmente por sus mensajes unidireccionales, que buscan llegar a la gran masa. En este nuevo modo de hacer campañas, el objetivo es la participación y la comunicación segmentada, lo que significa, enviar mensajes adecuados a cada uno de los públicos meta.
Obama fue uno de los pioneros en el uso de la comunicación 2.0, a través de la puesta en práctica de una adecuada estrategia de segmentación, la cual le permitió llegar a cada uno de sus electores con mensajes y propuestas estrictamente diseñadas para cada uno de ellos.En Argentina, Francisco de Narváez, fue el primero en dar este paso desde el mundo tradicional al del las estrategias 2.0. Ya en el 2007, el en ese entonces candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires comenzó a acercarse al mundo digital haciendo uso de Second Life como parte de su campaña. En las últimas elecciones la estrategia 2.0 ocupó un lugar primordial en su estrategia, ya que desarrolló diversos sitios Web que tenían un eje temático y objetivo específico, pero que juntos coadyuvaban al cumplimiento del gran objetivo.
Asimismo, De Narváez, puso al frente de su diagramación de campaña a un grupo de personas altamente capacitadas en el tema 2.0, para lograr así un posicionamiento que le permitiera vencer a sus principales contrincantes. Junto a profesionales de la comunicación y la imagen se trabajó sinérgicamente para proyectar un mensaje coherente que transmitiese los valores e ideas del candidato, buscando acercarlo a los jóvenes, un segmento estratégicamente importante pero difícil de alcanzar por su alejamiento y desinterés en la política.
Como puede verse, Internet está logrando ocupar un espacio trascendental en la vida política de nuestro país y del mundo, pero para obtener resultados es necesario implementar una planificación a largo plazo, de desarrollo y actualización constante. El mundo virtual es un lugar que cambia permanentemente y el cual hay que conocer muy bien si queremos ser exitosos. La improvisación e implementación irresponsable de este canal no suman al logro de los objetivos, por ello la capacitación, innovación y mejora continua son algunas de las premisas básicas que como comunicadores debemos tener en cuenta.
